El Poder Judicial de Tucumán se consolidó como referente nacional en materia de modernización y gestión judicial. Así lo demuestra el reciente acuerdo de cooperación firmado con la Corte Suprema de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), mediante el cual el sistema tucumano transferirá su experiencia en oralidad, gestión asociada y expediente digital a la capital del país.
“Este acuerdo es un convenio específico”, explicó la doctora Josefina Sánchez, coordinadora estratégica de la Corte Suprema de Tucumán. “Ya teníamos un convenio marco que nos vinculaba, y ahora vamos a transferir nuestros conocimientos y prácticas en materia de gestión de datos estadísticos, implementación de oficinas de gestión asociada y políticas judiciales que venimos desarrollando desde hace tiempo”, amplió a Radio Universidad.
Tucumán es hoy uno de los poderes judiciales más avanzados de la Argentina en organización y gestión, con procesos orales, oficinas de gestión asociada y una administración basada en datos. Estas transformaciones, iniciadas en 2019, redujeron los tiempos procesales y mejoraron la transparencia.
“La Ciudad de Buenos Aires está en un proceso de formación de su sistema de justicia y quiere adoptar una estructura similar a la que ya funciona aquí”, explicó Marcelo Zelarayán de Escalada, responsable de la Oficina de Gestión Judicial. Detalló que la CABA busca avanzar, inicialmente, en el fuero laboral, y que “a partir de la firma del convenio, se elaborará un plan de trabajo conjunto para asistirlos y compartir nuestra experiencia”.
Los resultados tucumanos respaldan el interés de otras jurisdicciones. Durante la visita de autoridades de CABA y de la Corte de Salta, se mostraron audiencias reales para ilustrar la celeridad del nuevo sistema. “Se tomó un juicio laboral que había ingresado el 3 de abril y cuya primera audiencia fue el 21 de octubre, con segunda audiencia ya fijada para diciembre. Es decir, un proceso que finalizará en menos de nueve meses”, relató Zelarayán.
Otro ejemplo fue un proceso civil iniciado en octubre del año anterior y que, tras las audiencias orales, ya estaba en etapa de sentencia: “Los abogados alegaron oralmente, como en las películas de Estados Unidos, algo completamente distinto a lo que pasaba antes”, añadió. Actualmente, Tucumán cuenta con más de treinta salas de audiencias equipadas y un promedio de 160 audiencias diarias, entre fueros penales y no penales. Este perfil oral, remarcó Sánchez, “es un cambio estructural que coloca al juez frente a las partes y permite una justicia más transparente y cercana”.
En cuanto a los tiempos procesales en causas de familia, filiación y sucesiones, la funcionaria explicó que también se observan mejoras concretas. “Hace dos años la Corte adquirió un equipo para realizar estudios de ADN en causas de filiación, lo que redujo los tiempos de más de un año a apenas tres semanas”, indicó Sánchez. Respecto de las sucesiones, agregó que “se implementó un nuevo formulario de inicio consensuado entre el Foro de Familia y el Colegio de Abogados, que permite resolver procesos simples en apenas 45 días”.
“Sin duda, todas estas medidas impactan directamente en los tiempos de respuesta. El objetivo de la Corte es resolver con eficiencia y calidad, acercando la justicia a la gente”, subrayó la coordinadora estratégica. Con estos avances, Tucumán consolida su posición como modelo de gestión judicial para otras jurisdicciones. “Es un orgullo que provincias como Salta y la Ciudad de Buenos Aires vengan a pedir asistencia técnica”, concluyó Zelarayán, destacando que “la justicia tucumana está demostrando que los tiempos pueden mejorar y que una justicia moderna es posible”.



