La Facultad de Ciencias Naturales y el Instituto Miguel Lillo, junto con la Fundación Miguel Lillo, se preparan para realizar las XVII Jornadas de Investigación, Docencia y Extensión en Ciencias Naturales, que tendrán lugar el 11 y 12 de diciembre de 2025 en la sede de Miguel Lillo 205. El encuentro, abierto al público y con una extensa tradición en el medio científico tucumano, busca difundir los trabajos que estudiantes, docentes e investigadores desarrollan durante el año en áreas que abarcan desde las ciencias biológicas hasta la geología, la química y el patrimonio natural.
En diálogo con Radio Universidad, Lucía Aráoz, presidenta de las Jornadas, recordó que el evento “comenzó en 1993 como una iniciativa de la Facultad”, pero que desde 2007 se fortaleció gracias al trabajo conjunto con la Fundación Miguel Lillo. “Son dos instituciones prestigiosas y el hecho de trabajar juntas hace que las jornadas sean más grandes, con más movimiento y con mayor llegada”. Su compañera en la organización, Leila González, vicepresidente del comité, subrayó que la convocatoria ya cuenta con “aproximadamente entre 250 y 300 trabajos”, una cifra que supera las expectativas iniciales.
Ambas destacaron el rol clave que las jornadas cumplen en la formación de los estudiantes. González explicó que participar como expositores “es una práctica fundamental para su vida profesional”, porque los obliga a hablar en público, utilizar lenguaje científico y defender sus ideas con claridad. Aráoz complementó esta idea al señalar que los alumnos “trabajan a la par del docente o investigador y participan desde la búsqueda bibliográfica hasta la escritura de resúmenes y la exposición oral”, un proceso que les permite explorar diversas áreas antes de tomar decisiones sobre su futuro. “Hay chicos que dicen: ‘Quiero conocer un poco de todo antes de elegir qué quiero hacer’”, contó.
Pese a las dudas iniciales sobre la posibilidad de realizar el evento en un contexto económico complejo, la organización decidió avanzar. “La primera reunión fue el 30 de septiembre y desde ese momento no paramos”, explicó Aráoz. Un equipo numeroso de docentes, estudiantes e investigadores se distribuyó tareas para garantizar la logística: asignación de aulas, coordinación de horarios simultáneos, búsqueda de patrocinios y armado del programa científico, que según reconocieron se asemeja a “un Tetris” por la cantidad de actividades paralelas.
Las jornadas incluirán charlas magistrales y mesas panel sobre temas estratégicos. La conferencia inaugural abordará patrimonio y geoturismo, una línea que, según González, “está moviéndose mucho a nivel mundial”. También se presentarán trabajos y exposiciones vinculados al cambio climático, al recurso hídrico, un tema crítico para la región, y al papel creciente de la inteligencia artificial en los procesos científicos. “Es ciencia pensada para la comunidad”, afirmaron.
Una de las novedades más relevantes será la apertura, por primera vez en este marco, de las colecciones científicas de la Facultad y de la Fundación Miguel Lillo. “Las colecciones siempre fueron algo restringido para investigadores, pero desde hace unos años hay un movimiento mundial para abrir estos patrimonios”, explicó Aráoz. La decisión constituye un gesto de confianza hacia la sociedad y una oportunidad para que el público conozca espacios habitualmente cerrados.
Además, el evento contará con una feria de emprendedores, donde estudiantes y miembros de la comunidad podrán exhibir y comercializar sus productos. Habrá también espacios destinados a la exposición de pósters, stands de institutos y actividades de extensión pensadas para acercar la ciencia a quienes no forman parte del ámbito académico. “La idea es mostrar y orientar —señaló González— porque abrir las puertas ayuda a que el estudiante que todavía no tiene definida una especialidad pueda encontrar su camino”.
Las actividades se desarrollarán durante ambos días, desde las 9:30 hasta las 18:00, con una pausa breve al mediodía. La entrada será libre y gratuita. “La ciencia no es cerrada, es abierta, y se trabaja para la comunidad”, resumió Aráoz, invitando a toda la sociedad a participar de un encuentro que promete combinar rigor científico, divulgación y espacios de intercambio en un ambiente accesible y plural.



