En el marco de los 50 años del Operativo Independencia, Pichi Matías entrevistó en FM 94.7 a Roberto Reynoso, escritor y poeta de profesión. Es oriundo de Famaillá (Tucumán) donde se instaló el primer centro clandestino de detención pocos meses antes del inicio de la última dictadura cívico militar argentina. Durante su juventud tuvo una comprometida participación en la militancia estudiantil. Luego, en la década del 70, fue preso político y vivió los peores años de vida.
“Yo soy un sobreviviente. En aquella época se puso en práctica la crueldad y la maldad. Todo lo que hicieron es imposible de olvidar y perdonar. Y los que hicieron eso nunca pidieron perdón de ninguna manera. Ahora se subieron a las alas de este gobierno y pretenden que nosotros les pidamos disculpas a ellos”, afirmó Reynoso.
Sobre los actos que se realizarán durante febrero en distintos lugares dijo: “hay que participar de todos los actos de este mes. Recordar a los compañeros caídos. Estamos ante un gobierno antipopular, antiargentino. Está probado el genocidio y la desaparición de personas”, agregó Reynoso.
Por último, reflexionó sobre la importancia de dar una discusión política en la actualidad y cómo reaccionar a los discursos de odio. “No responder a la provocación no significa la pasividad. Hay que estar en marchas, hay que participar, hay que ser solidarios. Hay que estar con el otro, ponerse en el lugar del otro. Creo que esa es una forma sana de resistencia y muy vital para, en algún momento, plantearnos un proyecto político distinto al de la actualidad”, fue la reflexión final de Reynoso.
Una mirada al pasado
El “Operativo Independencia”, fue un plan represivo que el Ejército Argentino llevó adelante en Tucumán en el marco del Decreto Nº 261/75 (firmado el 5 de febrero de 1975) con el objetivo de “aniquilar” a las organizaciones militantes establecidas en las zonas rurales de la provincia.
El 9 de febrero se produjo la ocupación militar con el desembarco de 1.500 soldados y el establecimiento del Comando Táctico de Acdel Vilas en la Comisaría de Famaillá, para “combatir a la guerrilla instalada en el monte”.
Las fuerzas se instalaron principalmente a lo largo de la ruta 38 y la población civil quedó dentro del territorio militarizado. “La Escuelita” de Famaillá, que en ese entonces era una escuela cuya construcción no había sido terminada, fue la sede del primer centro clandestino de detención del país. Allí estuvieron secuestradas alrededor de 3.000 personas.
El operativo resultó en el secuestro y asesinato de miles de obreros, estudiantes, docentes, militantes sociales y del ámbito político, familiares que buscaban a sus seres queridos.
Por los métodos empleados, se considera al “Operativo Independencia” como el inicio de la represión clandestina que se llevaría adelante de manera sistemática en la Argentina a partir del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.
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