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San Miguel de Tucumán

La FACET apuesta a la ciencia, a la inclusión y el desarrollo regional

La Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología de la Universidad Nacional de Tucumán desarrolla actividades de docencia, investigación y vinculación con el medio, con proyectos orientados a la formación de profesionales y al aporte al desarrollo provincial. Así lo expresó el Dr. Ing. Miguel Ángel Cabrera en una entrevista con Radio Universidad, donde destacó el rol estratégico de la universidad pública en el desarrollo social y productivo.

“Somos servidores públicos de la educación”, afirmó Cabrera, al sintetizar una visión de gestión basada en el compromiso cotidiano con la docencia, la investigación y la vinculación con la comunidad.

Ciencia aplicada y tecnología al servicio de la sociedad

Especialista en telecomunicaciones, Cabrera remarcó que continúa activo en tareas académicas y científicas. “Siempre hemos seguido haciendo investigación, docencia”, señaló, y agregó: “Tengo el orgullo de dirigir un laboratorio del departamento de electricidad, electrónica y computación”.

Desde ese espacio, se desarrollan proyectos de alto impacto tecnológico: “Hemos hecho muchos desarrollos para telefonía móvil, sistemas de radares, sistemas de aproximación automática para aviones”, en articulación con distintos organismos. “Trabajamos en colaboración con INVAP, con la Marina Argentina, tenemos muchos proyectos activos”.

En relación con el vínculo entre tecnología y ambiente, el ingeniero subrayó que el avance tecnológico ha permitido mejorar la eficiencia y reducir el impacto ambiental. “Cuando nació la telefonía móvil, los teléfonos tenían casi 4 W de potencia. Hoy en día los teléfonos tienen miliwatts de potencia”, explicó, y concluyó: “El progreso no puede ser el enemigo de la naturaleza, al contrario”.

Conectividad, territorio y equidad

Cabrera destacó que las telecomunicaciones cumplen un rol clave en la inclusión social. “La tecnología ha logrado con los años acercar a las personas”, sostuvo, y puso como ejemplo la posibilidad de asistir a pacientes en zonas alejadas mediante videollamadas.

Sobre la situación del país, consideró que “la Argentina tiene una conectividad adaptada a su distribución geográfica”, y afirmó que “Tucumán tiene una conectividad bastante aceptable para nuestro nivel de vida”. Sin embargo, advirtió que la conectividad debe tener un sentido social: “Conectividad por conectividad misma no tendría mucho sentido, tiene que ir acompañada de un crecimiento socioeconómico de la población”.

Ingreso universitario, permanencia y egreso

Uno de los ejes centrales de la gestión académica es el acompañamiento a los ingresantes. “Todos los años se imparte un curso de nivelación en tres módulos para que los chicos tengan un ingreso más adaptado al primer año y a la exigencia del primer año de la facultad”, explicó. El objetivo, indicó, es claro: “Evitar niveles elevados de fracaso, que es lo que más nos preocupa a nosotros como educadores”.

En términos cuantitativos, la Facultad registra “entre 1000 y 1200 estudiantes” que ingresan cada año, mientras que el número de egresados alcanza “250 profesionales entre ingenieros, técnicos y licenciados”. Según precisó, esto representa “un 22% de la tasa entre ingreso anual y egreso anual”, un valor que se encuentra “por arriba de la media nacional”.

Alta demanda laboral para los graduados

La inserción laboral de los egresados es uno de los puntos fuertes de la Facultad. “Nuestros estudiantes son requeridos ya cuando se están por recibir”, afirmó Cabrera, tanto por “industrias locales, industrias nacionales y multinacionales”.

Asimismo, anticipó un escenario de alta demanda profesional: “Para el año que viene se van a necesitar miles de ingenieros a nivel país”, especialmente en áreas como “ingeniería industrial, mecánica, civil, eléctrica y electrónica”, en el marco de nuevos desarrollos productivos como la minería.

Un proyecto estratégico: el tren de cercanía al aeropuerto

Entre los proyectos impulsados desde la Facultad, se destaca el diseño de un tren de cercanía que conecte la estación Mitre con el aeropuerto. “Es un proyecto completo”, desarrollado por un estudiante de ingeniería civil junto a sus tutores, explicó Cabrera.

El plan prevé aprovechar infraestructura existente, con una inversión estimada de “aproximadamente 7 millones de dólares”. Según detalló, el impacto sería significativo: “Calculamos que habría un transporte de pasajeros entre el orden de 2500 a 3000 personas por día”, beneficiando no solo a quienes viajan en avión, sino también a zonas como Alderete.

“Todo lo que mejora la calidad de vida de las personas y apunta a mejorar el comercio y la distribución del ingreso es bueno para la sociedad”, afirmó.

Cierre de gestión y proyección institucional

Hacia el final de la entrevista, Cabrera se refirió al cierre de su etapa al frente de la Facultad. “Yo asumí en mayo del 2018. Este sería mi último mandato, puesto que es mi segundo mandato”, explicó, y reconoció que “siempre nos queda pendiente algo cuando uno hace gestión”, como la aprobación de nuevos planes de estudio.

Finalmente, confirmó su proyección institucional: “Hemos hecho una presentación pública con la doctora Virginia Dalla para presentarnos como rectora y vicerrectora de la Universidad Nacional de Tucumán”, y señaló que la propuesta busca poner “nuestro conocimiento y nuestra experiencia” al servicio de la comunidad universitaria.

La Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología de la Universidad Nacional de Tucumán desarrolla actividades de docencia, investigación y vinculación con el medio, con proyectos orientados a la formación de profesionales y al aporte al desarrollo provincial. Así lo expresó el Dr. Ing. Miguel Ángel Cabrera en una entrevista con Radio Universidad, donde destacó el rol estratégico de la universidad pública en el desarrollo social y productivo.

“Somos servidores públicos de la educación”, afirmó Cabrera, al sintetizar una visión de gestión basada en el compromiso cotidiano con la docencia, la investigación y la vinculación con la comunidad.

Ciencia aplicada y tecnología al servicio de la sociedad

Especialista en telecomunicaciones, Cabrera remarcó que continúa activo en tareas académicas y científicas. “Siempre hemos seguido haciendo investigación, docencia”, señaló, y agregó: “Tengo el orgullo de dirigir un laboratorio del departamento de electricidad, electrónica y computación”.

Desde ese espacio, se desarrollan proyectos de alto impacto tecnológico: “Hemos hecho muchos desarrollos para telefonía móvil, sistemas de radares, sistemas de aproximación automática para aviones”, en articulación con distintos organismos. “Trabajamos en colaboración con INVAP, con la Marina Argentina, tenemos muchos proyectos activos”.

En relación con el vínculo entre tecnología y ambiente, el ingeniero subrayó que el avance tecnológico ha permitido mejorar la eficiencia y reducir el impacto ambiental. “Cuando nació la telefonía móvil, los teléfonos tenían casi 4 W de potencia. Hoy en día los teléfonos tienen miliwatts de potencia”, explicó, y concluyó: “El progreso no puede ser el enemigo de la naturaleza, al contrario”.

Conectividad, territorio y equidad

Cabrera destacó que las telecomunicaciones cumplen un rol clave en la inclusión social. “La tecnología ha logrado con los años acercar a las personas”, sostuvo, y puso como ejemplo la posibilidad de asistir a pacientes en zonas alejadas mediante videollamadas.

Sobre la situación del país, consideró que “la Argentina tiene una conectividad adaptada a su distribución geográfica”, y afirmó que “Tucumán tiene una conectividad bastante aceptable para nuestro nivel de vida”. Sin embargo, advirtió que la conectividad debe tener un sentido social: “Conectividad por conectividad misma no tendría mucho sentido, tiene que ir acompañada de un crecimiento socioeconómico de la población”.

Ingreso universitario, permanencia y egreso

Uno de los ejes centrales de la gestión académica es el acompañamiento a los ingresantes. “Todos los años se imparte un curso de nivelación en tres módulos para que los chicos tengan un ingreso más adaptado al primer año y a la exigencia del primer año de la facultad”, explicó. El objetivo, indicó, es claro: “Evitar niveles elevados de fracaso, que es lo que más nos preocupa a nosotros como educadores”.

En términos cuantitativos, la Facultad registra “entre 1000 y 1200 estudiantes” que ingresan cada año, mientras que el número de egresados alcanza “250 profesionales entre ingenieros, técnicos y licenciados”. Según precisó, esto representa “un 22% de la tasa entre ingreso anual y egreso anual”, un valor que se encuentra “por arriba de la media nacional”.

Alta demanda laboral para los graduados

La inserción laboral de los egresados es uno de los puntos fuertes de la Facultad. “Nuestros estudiantes son requeridos ya cuando se están por recibir”, afirmó Cabrera, tanto por “industrias locales, industrias nacionales y multinacionales”.

Asimismo, anticipó un escenario de alta demanda profesional: “Para el año que viene se van a necesitar miles de ingenieros a nivel país”, especialmente en áreas como “ingeniería industrial, mecánica, civil, eléctrica y electrónica”, en el marco de nuevos desarrollos productivos como la minería.

Un proyecto estratégico: el tren de cercanía al aeropuerto

Entre los proyectos impulsados desde la Facultad, se destaca el diseño de un tren de cercanía que conecte la estación Mitre con el aeropuerto. “Es un proyecto completo”, desarrollado por un estudiante de ingeniería civil junto a sus tutores, explicó Cabrera.

El plan prevé aprovechar infraestructura existente, con una inversión estimada de “aproximadamente 7 millones de dólares”. Según detalló, el impacto sería significativo: “Calculamos que habría un transporte de pasajeros entre el orden de 2500 a 3000 personas por día”, beneficiando no solo a quienes viajan en avión, sino también a zonas como Alderete.

“Todo lo que mejora la calidad de vida de las personas y apunta a mejorar el comercio y la distribución del ingreso es bueno para la sociedad”, afirmó.

Cierre de gestión y proyección institucional

Hacia el final de la entrevista, Cabrera se refirió al cierre de su etapa al frente de la Facultad. “Yo asumí en mayo del 2018. Este sería mi último mandato, puesto que es mi segundo mandato”, explicó, y reconoció que “siempre nos queda pendiente algo cuando uno hace gestión”, como la aprobación de nuevos planes de estudio.

Finalmente, confirmó su proyección institucional: “Hemos hecho una presentación pública con la doctora Virginia Dalla para presentarnos como rectora y vicerrectora de la Universidad Nacional de Tucumán”, y señaló que la propuesta busca poner “nuestro conocimiento y nuestra experiencia” al servicio de la comunidad universitaria.

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